Opel ha renovado la gama de motores del SUV compacto Grandland X para hacer frente a la dura normativa de emisiones Euro 6d Temp, e incluso para la Euro 6. Por su parte, también se lanza al mercado la versión híbrida Hybrid4, el primer Opel híbrido enchufable.
El nuevo Opel Grandland X Hybrid4 ya se encuentra a la venta en su versión tope de gama. Es decir, con tracción a las cuatro ruedas, una potencia combinada de 300 CV y el nivel de acabado más alto Ultimate. Tiene un precio de 53.000 euros y las primeras unidades se espera que se entreguen a principios del año que viene.
Dentro de unos meses también estará disponible una versión un poco más asequible. Se trata de la variante 4x2 con 225 CV, la cual podrá adquirirse desde 41.600 euros con un nivel de acabado de acceso.
Para conocer todos los detalles del nuevo Opel Grandland X Hybrid4, podéis pinchar este enlace: Todo sobre el Opel Grandland X Hybrid4
Gama mecánica renovada
Nosotros todavía no hemos podido probar el modelo híbrido, pero sí que hemos tenido la oportunidad de conducir durante varios kilómetros algunas mecánicas térmicas del Grandland X, un modelo que ya hemos probado otras veces y del que podéis ver algunas de nuestras “reviews” en el siguiente enlace: Todo sobre el Opel Grandland X.
La nueva gama de motores que se ofrecen con el SUV compacto Grandland X, está compuesta por dos mecánicas de gasolina y otras dos diésel, con transmisiones manuales o automáticas a elegir. Por supuesto, todas ellas cumplen con la normativa de emisiones Euro 6d Temp.
En diésel el motor de acceso a la gama es el 1.5 litros con 130 CV de potencia y un par máximo de 300 Nm. Este motor está disponible con caja de cambios manual de 6 relaciones o automática de 8 velocidades. Dependiendo de si se elige con una u otra transmisión el consumo medio homologado varía entre los 4,1 y los 4,2 l/100 km y las emisiones de CO2 entre los 108 y los 110 g/km.
El motor tope de gama en diésel es el 2.0 de 177 CV y 400 Nm de par. Este motor sólo está disponible con el cambio automático de 8 relaciones con el que consigue una aceleración de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 214 km/h. Por su parte, el consumo medio homologado es de 4,9 l/100 km con unas emisiones de CO2 de 126 g/km.
Para el cliente que prefiera los motores de gasolina, la oferta de acceso a la gama está compuesta por el propulsor 1.2 turbo de 130 CV y 230 Nm de par. Se trata de un motor con inyección directa y fabricado completamente en aluminio. Como en el diésel de acceso, en este caso también está disponible con cambio manual de 6 marchas o automático de ocho. En cuanto al consumo, homologa una media de 5,2 o 5,3 l/100 km, dependiendo de la transmisión elegida, y unas emisiones de 119 a 121 g/km de CO2.
La propuesta más dinámica está compuesta por el motor de gasolina de 1.6 litros, 180 CV y 250 Nm de par máximo disponible a tan sólo 1.750 rpm. Con este motor, que únicamente puede asociarse al cambio automático de 8 velocidades, el consumo medio homologado se queda en 7,1 l/100 km y las emisiones de CO2 en 130 g/km.
Para reducir aún más el consumo y las emisiones, Opel emplea algunas medidas “eco” para mejorar su eficiencia. Por ejemplo, a partir de octubre, todos los modelos que entren a producción contarán con iluminación LED, tanto exterior como interior, y los neumáticos de serie serán de baja resistencia a la rodadura.
Durante el evento organizado por la firma alemana Opel, he podido conducir brevemente las dos mecánicas de acceso a la gama, tanto en diésel como en gasolina, y ambas con cambio de marchas manual.
Ambos motores cumplen con firmeza su cometido, que no es otro que el de mover con cierto soltura al Grandlan X, aunque no esperéis una respuesta fulgurante. El pequeño tricilíndrico de gasolina, con sólo 1,2 litros de cilindrada, se posiciona como un motor muy completo dentro de este tipo de mecánicas de tres cilindros. Tiene una respuesta un poco áspera en cuanto a sonido y vibraciones, más propias de un diésel, pero en cuanto a comportamiento, su propuesta es realmente buena: muy buenos bajos y una zona media con bastante brío muy útil para adelantar en carretera. Lástima que no se estire demasiado.
En cuanto al diésel de 130 CV, se nota su mayor par motor pero también es cierto que se acaba mucho antes. En el fondo son dos mecánicas que me han parecido bastante parejas en cuanto a su funcionamiento. Las dos mueven bastante bien al Grandland X, aunque el diésel gasta menos, pero es más caro. Ahí cada uno deberá hacer sus propios cálculos.
En canto al coche, poco más que añadir a las varias pruebas realizadas por mis compañeros de redacción. El Opel Grandland X es un SUV compacto muy equilibrado que cumple a la perfección con lo que uno espera de un coche de estas características. Me ha parecido un coche cómodo para viajar, lo he probado por autopista y carretera secundaria, con un tacto de dirección un poco artificial y blando pero con un guiado bastante preciso. Las suspensiones sorprenden por una puesta a punto muy buena, con una excelente relación entre firmeza y absorción.
La lista de precios (sin descuentos) queda de la siguiente manera:
Opel Grandland X Selective 1.2 Turbo 130 CV man. 26.200 euros Opel Grandland X Selective 1.5 CDTI 130 CV man. 28.500 euros Opel Grandland X Opel 2020 1.2 Turbo 130 CV man. 29.200 euros Opel Grandland X Opel 2020 1.2 Turbo 130 CV auto. 31.200 euros Opel Grandland X Opel 2020 1.5 CDTI 130 CV man. 31.500 euros Opel Grandland X Opel 2020 1.5 CDTI 130 CV auto. 33.500 euros Opel Grandland X Ultimate 1.2 Turbo 130 CV man. 32.700 euros Opel Grandland X Ultimate 1.2 Turbo 130 CV auto. 33.400 euros Opel Grandland X Ultimate 1.5 CDTI 130 CV auto. 37.000 euros Opel Grandland X Ultimate 2.0 CDTI 180 CV auto. 40.700 euros Opel Grandland X Ultimate 1.6 Turbo 180 CV auto. 37.600 euros
