Una pequeña start up israelí llamada REE quiere, según sus propias palabras, revolucionar el mundo del automóvil eléctrico con la reinvención de la rueda. La empresa ha desarrollado ruedas que incorporan un módulo donde podemos encontrar todo aquellos que consigue que la rueda gire y el coche avance.
La idea de REE es construir plataformas sobre las que los fabricantes desarrollen sus modelos. Y para ello, han buscado ofrecer una solución de plataforma plana, muy fina (el grosor lo define la cantidad de baterías eléctricas que se dispongan en ese piso plano) y, sobre todo, sin ningún elemento que obstaculice el desarrollo de la carrocería del vehículo. Y, aunque esto ya es un poco más difícil de integrar en un uso diario, para cambiar lo que se coloca encima y poder usar una misma plataforma para conceptos de vehículo diferentes. Para ello han desplazado a los módulos de rueda todos los elementos de un coche.
Cada rueda integra un sistema de suspensión que puede ser normal o semi-activo y con posibilidad de mantener constante la altura al suelo independientemente de la carga. También integra, por supuesto, el motor, un diferencial electrónico con el que generar un efecto vectoring, la posibilidad de una reducción para el cambio, el freno y la dirección.
Según la compañía, esta solución tiene múltiples ventajas, entre ellas la eliminación de ruidos y vibraciones en la estructura, la facilidad de montaje, sustitución y reparación, ya que basta con cambiar una rueda (más pesada, eso sí) para que el vehículo vuelva a funcionar, una amplia gama de tamaños de rueda disponibles y, sobre todo, la facilidad de adaptación a cualquier uso ya que se pueden montar motores de muy distinta potencia, se pueden construir vehículos de dos o cuatro ruedas motrices, de dos o cuatro ruedas directrices, con diferentes durezas de suspensión y con cualquier distancia entre ejes.
REE sostiene que la base puede adaptarse a cualquier uso, desde modelos deportivos a furgones de uso urbano pasando por shuttles para el transporte de personas e incluso, para el reparto autónomo de mercancías.
La primera aplicación
La empresa japonesa Hino, un fabricante de camiones del Grupo Toyota ha sido la primera en interesarse por este sistema para un proyecto de futuro. Se trata de un camión eléctrico de plataforma plana con dos ruedas delanteras de gran tamaño y cuatro ruedas traseras de pequeño tamaño para conseguir una tracción 6x6.
En las ruedas delanteras grandes se ubican el motor, el freno, la centralita electrónica, la transmisión, la suspensión, la unidad de dirección y el anclaje de todo el conjunto a la plataforma mediante cuatro tornillos. En las ruedas traseras, el motor, la transmisión y la suspensión se integran en un único elemento que va montado en unos soportes que evitan el ruido y las vibraciones y que, a su vez, se anclan a la plataforma. Dentro de este elemento principal, la suspensión está colocada en posición horizontal y los motores y los frenos están dentro del propio módulo con posibilidad de convertir el vehículo en 6x6 cuando sea necesario.
Hino añade al concepto una estructura básica realizada mediante impresión 3D a la que se acoplan los paquetes de baterías y los módulos de rueda según la solución de REE. Una vez fabricados, el cliente es el que elige el tipo de vehículo que necesita y que la empresa imprimirá en tres dimensiones y ajustará sobre el chasis mediante un sistema estandarizado de acople. El sistema permite el desacople de la unidad de manera que la base, que puede funcionar autónomamente, pueda tener múltiples usos. El vehículo permitirá una gestión automatizada de las cargas y los repartos. Hino trabaja en una reinterpretación completa del transporte y el reparto que permita incluso la entrega y recogida personalizada en el mismo vehículo.
Parece ciencia ficción ¿verdad? Pues lo más probable es que lo veamos muy pronto. Este tipo de sistemas no solo facilitan la producción de automóviles y la abaratan sino que también simplifican tanto el desarrollo de los modelos como la posibilidad de ofrecer vehículos al gusto de cada uno con una gran facilidad de adaptación. Tiempo al tiempo.
